Dios nos ama tanto que hasta ha querido amarnos con un corazón humano traspasado.
jueves, 3 de septiembre de 2015
El silencio culpable
Existe en el mundo -en nuestro mundo, en nuestro siglo- un sufrimiento atroz ante el que muchos no se atreven a gritar. Se trata de la persecución que padecen tantas almas, en su mayoría cristianas, a causa de su fe.
No hay comentarios:
Publicar un comentario