El 23 de mayo en la parroquia de la Inmaculada Concepción de la diócesis de Getafe el obispo Joaquín María López de Andújar bautizó 11 bebés peculiares.
Los 11 bebés estuvieron a punto de ser abortados... su vida se salvó porque unos rescatadores se acercaron a sus madres cuando acudían al centro abortista.
En el bautizo abundaban las madres jóvenes, algunas con los 18 años recién cumplidos.
La asociación MásFuturo-Rescatadores Juan Pablo II (https://rescatadoresjp.wordpress.com) ha salvado ya unos 1.200 bebés con su trabajo en la calle ante centros abortistas.
Y cada bebé tiene una historia, que muestra lo cerca que estuvo de lo muerte, lo fácil, lo seductor incluso, que habría resultado matarlo.
Decían que nacería enfermo... y nació sano
Por ejemplo, a Diego le diagnosticaron un 90% de probabilidades de nacer con malformación. Todos los médicos le aconsejaron abortarlo. Pero su madre se encontró con dos Rescatadoras en la puerta de un abortorio de Madrid. Ella, embarazada ya de seis meses, parecía muy segura de que no quería tener el bebé. Pero poco a poco empezó a escuchar a los rescatadores y apostó por la vida. Hoy es un bebé precioso, sano, normal... y para su madre es el “preferido de todos”.
La que daba mucho plantones
Marta Velarde, de MásFuturo, cuenta también el caso de Melanie, una chica muy joven. "Cuando la conocimos iba con otras dos amigas que estaban dentro abortando. Ella estaba fuera esperando su turno. Pero el rescatador la convenció de que nos escuchara primero. Nos dio muchos plantones, era muy difícil. Pero ahora no se separa de su niña. Nos consulta todos los pasos de su complicada vida que poco a poco ha conseguido enderezar. Siempre se apunta a todas las catequesis. Y eso que su familia no es católica".
"Cuando ya nos íbamos a casa..."
Otro caso fue el del bebé Ismael. "Su madre iba a entrar en el abortorio que le llamamos El Cementerio el pasado mes de agosto. Calor, cansancio, y ni un atisbo de sombra. Cuando ya nos íbamos a casa nos cruzamos con ella. Nos escuchó muy callada. Nos dejó su teléfono. Y no entró", explica Marta Velarde.
Foto de mamás, a veces también papás, los bebés bautizados y los padrinos, madrinas y rescatadores... donde había soledad, desesperación y cercanía de muerte
hay ahora vida, alegría, acompañamiento, ánimo y esperanza para el futuro
Una chica que estaba muy sola
Otro caso es el de Anita. "La rescatadora que nos pasó el número de teléfono de Anita nos repetía continuamente que había conseguido que no entrara en el abortorio pero que estaba muy sola, y que en cualquier momento podía abortar. Quedé con ella en las puertas de donde se tramitan los abortos en la Comunidad de Madrid. Le falta mucho amor en su corta vida. Hoy es una chica muy feliz, alegre, con sus dos niños. Se ha hecho a sí misma y le da tiempo a estudiar y trabajar. Nos tiene admirada. Está muy ilusionada con el bautizo de su niña", cuenta Marta Velarde.
La que rezaba camino del abortorio
Eli era una inmigrante embarazada que mientras caminaba hacia el abortorio pedía al Cielo una señal que le indicara qué debía hacer. Se encontró a unos universitarios de los Rescatadores Juan Pablo II repartiendo folletos de ayudas para embarazadas. Eli tenía ya tres hijos en su país, y estaba sin trabajo y sin apoyo. Hoy trabaja mucho, y su bebé es el más bueno de todos. Eli hoy dice a los rescatadores: “vosotros salvasteis a mi hijo, pero me rescatasteis a mí”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario