Fulminante de amor, que gana para siempre a Judah Ben-Hur, pero también fulminante de autoridad, frenando en seco al soldado romano. Es una escena de Ben-Hur, dirigida en 1959 por William Wyler (cuando aún muchos cineastas no se atrevían a poner rostro a Nuestro Señor) y uno de los papeles inolvidables del gran Charlton Heston (1923-2008).
Dios nos ama tanto que hasta ha querido amarnos con un corazón humano traspasado.
Entradas populares
-
( ACI ) .- Con más de 1,7 millones de dólares provenientes de la cooperación internacional, dos organizaciones no gubernamental...
-
«Restañar la herida del que sufre, mi hermano»: un libro online para convencernos de Su misericordiaDiego Germán Passadore quiere difundir la convicción firme del poder de la misericordia de Dios ReL Diego Germán Passadore Duró publi...
-
El sacerdote neocatecumenal pide el fin de la «ceguera» y la «tibieza» de los creyentes La Iglesia no puede ser apocada ni tibia al denuciar...
-
"Bajo el peso del dolor, a ti, querida santa Rita, recurro con confianza" Inmediatamente después de la muerte, santa Rita d...
lunes, 5 de octubre de 2015
La mirada de Jesús
Fulminante de amor, que gana para siempre a Judah Ben-Hur, pero también fulminante de autoridad, frenando en seco al soldado romano. Es una escena de Ben-Hur, dirigida en 1959 por William Wyler (cuando aún muchos cineastas no se atrevían a poner rostro a Nuestro Señor) y uno de los papeles inolvidables del gran Charlton Heston (1923-2008).
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario