Entradas populares

domingo, 5 de junio de 2016

Cuando María contesta al teléfono por Jesús

Una curiosa (y conmovedora) comparación sobre nuestros pedidos a Jesús o a María
maria y jesus


Una señora fue al médico y, después de hacerse algunos exámenes, el médico le preguntó:
– ¿Usted es protestante?
– Sí.
– Yo tengo muchos amigos protestantes y me caen muy bien. Sólo tienen un problemilla: hablan mucho de Jesús, pero se olvidan de María…
Silencio
– Doctor, ¿le puedo hacer otra pregunta?
– ¡Claro!
– Si yo llegara aquí y su secretaria me dijera que usted no está, pero que su madre sí, ¿usted piensa que yo iba a querer hacerme la consulta con ella?
– Claro que no, ella no es doctora.
– Pues eso, doctor. Quien murió en la cruz por mí fue Él, no ella.
Silencio…
– Es verdad. Pero ¿puedo preguntarle una cosa más?
– ¡Claro!
– Yo soy su médico y usted tiene confianza sólo en mí. Pero imagine que usted está en casa, enferma, me llama y yo no puedo contestar en ese momento. Pero usted conoce a mi madre, habla con ella y le pide que ella me avise para que yo le devuelva la llamada. ¿Usted piensa que yo, como hijo, le diría que “no” a mi madre?
– Esto también es verdad, doctor. Pero yo pienso que esa comparación no existe. Porque Jesús nunca está ocupado para atender nuestra llamada. Jesús siempre está con nosotros.
– Es verdad, pero María está siempre con Jesús y sabe que, de vez en cuando, Él nos prueba en la paciencia, en la perseverancia… Él parece que a veces se hace el “sordo” cuando suplicamos algo, a propósito, ¿no es verdad? Así como el Padre, a veces, parecía no escuchar a su Hijo Jesús, en esas terribles horas de prueba… No es que Él no oiga, es que, por razones que sólo Él sabe, a veces, por nuestro bien, se hace el “difícil”… Y no hay nada como recurrir al refuerzo de la Madre de Dios para “acelerar” un poco las cosas “en la familia”… Además, fue Él quien nos presentó a María también como nuestra madre ("Mujer, he aquí tu hijo"). ¿Quién fue quien envió?

La señora sonrió. Realmente… si somos todos una familia, ¿por qué no actuar en familia?

No hay comentarios:

Publicar un comentario