Aquí podemos ofrecerle sólo unos cuantos aspectos de las mil maravillas de la Santa Misa Los principales frutos y beneficios del Santo Sacrificio de la Misa. 1 |
Los principales frutos y beneficios de este sacrificio están expresados en varios pasajes del canon de la Santa Misa, y son los siguientes: 1. El sacrificio de la Santa Misa honra a Dios con el máximo honor que Él pueda recibir, porque es su propio Hijo quien le tributa este honor al aniquilarse y al destruirse, en la medida que puede, para gloria de Dios. Y quienes asisten a la Santa Misa y tienen la dicha de participar en ella, también honran a Dios del modo más sublime que puedan hacerlo, mediante la unión que en ella tienen con Jesucristo. San Juan Bautista de la Salle |
Los principales frutos y beneficios del Santo Sacrificio de la Misa. 2 |
2. Este sacrificio ofrece el medio de dar gracias a Dios por sus beneficios, de la forma más perfecta que pueda hacerse, al ofrecerle a su propio Hijo en acción de gracias. 3. Nos permite obtener de la bondad de Dios nuevos beneficios. 4. Este sacrificio libera a las almas que sufren en el purgatorio, o alivia sus sufrimientos, en la medida en que esas almas son aún deudoras a la justicia de Dios. San Juan Bautista de la Salle |
Los principales frutos y beneficios del Santo Sacrificio de la Misa. 3 |
5. Remite la pena temporal debida tanto por el pecado mortal como por el pecado venial. 6. Obtiene la remisión de los pecados y la gracia de la conversión. 7. Atrae de Dios las gracias que se necesitan para preservarse de caer en el pecado. 8. Proporciona la gracia de abandonar los malos hábitos, por inveterados que sean. San Juan Bautista de la Salle |
Los principales frutos y beneficios del Santo Sacrificio de la Misa. 4 |
9. Da fortaleza para abandonar totalmente todas las ocasiones próximas del pecado. 10. Otorga la gracia de la unión y de la reconciliación con el prójimo, si hubiera alguien con quien no se estuviese tan unido como se debiera. 11. Alcanza poderosa ayuda para cumplir debidamente las obligaciones del propio estado y para realizar todas las acciones de manera cristiana. San Juan Bautista de la Salle |
Mi manjar es el que conforta el corazón del hombre. |
...Ya para mi saciedad no espero las cosechas anuales, Cristo se me sirve todos los días. No temeré que algún mal temporal del cielo o esterilidad de campo me lo disminuya, con tal que persevere la diligencia del culto piadoso. Ya no deseo que desciendan para mí las lluvias de codornices que antes admiraba Ex 16,13; ni el maná que prefería antes a todos los manjares Jn 6,31.49. Mi manjar es aquel que, el que lo comiere, no tendrá hambre Jn 6,35. Mi manjar es el que no aumenta el cuerpo, sino que conforta el corazón del hombre. San Ambrosio, Doctor de la Iglesia |
Los minutos que siguen a la Comunión. |
Los minutos que siguen a la Comunión, son los más preciosos que tenemos en nuestras vidas. Son los minutos más propicios de parte nuestra para tratar con Dios, y de Su parte, para comunicarnos Su Amor. Santa María Magdalena de Pazzi |
La Carne de Dios es manjar para mí y la Sangre de Dios es bebida para mí. | |
Soy recibido al honor de la mesa celestial; para mis manjares no hace falta la lluvia, no se rotura la tierra, no dan fruto los árboles; para mi bebida no hay que buscar ríos ni fuentes. Cristo es para mí comida, Cristo para mí bebida: la Carne de Dios es manjar para mí y la Sangre de Dios es bebida para mí... San Ambrosio, Doctor de la Iglesia | |
|
No hay comentarios:
Publicar un comentario