El escritor Claudio de Castro explica cuál es la respuesta definitiva y dónde encontrarla
Dios es bueno. Eso lo sé bien. Toda mi vida me he sentido acompañado, abrazado, protegido, cuidado, consentido y amado con un amor infinito y paternal.
Dios siempre se ha fijado en nosotros sus hijos, y nos ama, a pesar de:
- Lo que pensamos sabiendo que lo ofende.
- Lo que hacemos voluntariamente para alejarnos de Él.
- Lo que dejamos de hacer, el pecado de la omisión.
- Lo que vemos y no debemos, sabiendo que nos lleva al pecado.
- Lo que decimos, sabiendo que no está bien.
Poco pensamos en las consecuencias de nuestras malas acciones. Y no siempre hacemos lo que debemos. Lo sé por experiencia propia.
La importancia de leer la Biblia
Para mí un remedio eficaz es conocer el amor de Dios. ¿Quién va a querer ofender a un Dios tan bueno?
¿Cómo conocerlo? Todo nos muestra su amor. Pero en la Biblia nos habla de cuánto nos ama.
Leer la Biblia es un hábito que todo católico debe tener. Un ratito cada día por la mañana. Toma tu Biblia, ábrela y lee.
Allí suelo encontrar las respuestas a mis inquietudes. Hay más de 3.000 promesas divinas, palabras de consuelo y la sabiduría que necesitamos para continuar y fortalecer nuestras vidas.
Alguien me dijo que vivía su vida al máximo para sacarle el jugo. «Solo tengo esta vida y debo disfrutarla».
«Dios te ama», le respondí «y espera más de ti».
Entonces me preguntó molesto: «¿Cómo sé que Dios me ama? Dame una prueba«.Le di una respuesta Bíblica.
La respuesta está en Jesús
Me encanta poder hacerlo. Tenemos al mejor maestro que es Jesús. Respondió en el desierto a todas las tentaciones del demonio con versículos Bíblicos, que son irrefutables: «está escrito…«.
Te mostraré lo que le respondí a mi amigo. Es una respuesta extraordinaria que podría servirte también si te haces esa pregunta:
«¿Dios me ama a pesar de lo que soy y lo que hago?«.
Ahora abre tu Biblia en Romanos 5, 8-12 y lee:
Mas la prueba de que Dios nos ama es que Cristo, siendo nosotros todavía pecadores, murió por nosotros
Listo. Allí está la respuesta. A mí me impresiona mucho leerla. También se encuentra en 1 Juan 4, 10. Búscalo en tu Biblia.
En esto se manifestó el amor que Dios nos tiene; en que Dios envió al mundo a su Hijo único para que vivamos por medio de él.
En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó y nos envió a su Hijo como propiciación por nuestros pecados.
Pero no te detengas allí amable lector, volvamos a Romanos 5. Nos esperan palabras maravillosas que nos llenan de esperanza. Sigamos leyendo:
«Con cuánta más razón, pues, justificados ahora por su sangre, seremos por él salvos de la cólera!
Si cuando éramos enemigos, fuimos reconciliados con Dios por la muerte de su Hijo, ¡con cuánta más razón, estando ya reconciliados, seremos salvos por su vida!
Y no solamente eso, sino que también nos gloriamos en Dios, por nuestro Señor Jesucristo, por quien hemos obtenido ahora la reconciliación».
Un gran consuelo a tu alcance
Ahora lo sabes, no hay espacio para la duda.
Dios te ama y espera mucho de ti. Quiere que seas santo, santa, para que puedas pasar la eternidad a su lado.
Te invito a que te acostumbres a leer la Biblia, será de gran consuelo para ti.
Ama a Dios. Él te amó primero y te sigue amando.
Me gusta mucho esta reflexión de san Claudio de la Colombiere que se aplica a cada uno de nosotros:
“A cualquier precio que sea, es necesario que Dios esté contento»
Me gustaría terminar este pequeño encuentro que hemos tenido con una curiosidad bíblica. La encontré de casualidad en Internet y me encantó. Vale la pena compartirla. ¡Es genial!
¿Sabes cuál es la palabra más repetida en la Biblia?
La palabra Dios es la más repetida lógicamente, puesto que todo se refiere a Él.
¿Te gustaría compartir con nosotros tu búsqueda de Dios? Puedes escribirme. Te dejo mi email personal. cv2decastro@hotmail.com
Claudio de Castro
Vea también El problema del mal y del sufrimiento -
San Juan Pablo II
No hay comentarios:
Publicar un comentario