El Arzobispado de Lima, ante la absoluta falta de respeto a la fe de los
católicos expresada en el maltrato a la Eucaristía – presencia real de
Jesucristo entre nosotros, instituida por el propio Jesús – incitando a su robo
y utilización vil, manifiesta su firme rechazo ante tan frívola e irresponsable
utilización que constituye, en la Iglesia, un acto sacrílego que implica pena
de excomunión late sententiae para el
creyente que lo perpetre o lo incite.
Las personas que
han cometido este agravio – si bien ya han retirado el indigno pasaje del video
– deben recordar que no se ha cometido solo un acto sacrílego, sino, también,
un daño a un valor fundamental que contribuye a la unidad y conformación humana
y espiritual de la nación peruana, y que está protegida en el art. 50 de la
Constitución de 1993: «el Estado reconoce a la Iglesia Católica como elemento
importante en la formación histórica, cultural y moral del Perú, y le presta su
colaboración».
Llamamos a
todos, creyentes y no creyentes, a proteger todos los elementos de valor humano
y religioso que han dado sentido a nuestra peruanidad y que hemos heredado
desde la fundación de la República; valores que no pueden ser pisoteados, ni
mal usados, ni denigrados, ni vapuleados, ni confundidos con sortilegios y hechicerías
que, más bien, constituyen signo de antireligión.
Esta confusión
conduce no solo a despreciar la contribución de la fe católica a la vida
nacional, sino, también, a burlar los valores sagrados y los signos que nos dan
unidad y animan nuestra esperanza en la promesa peruana. Son acciones y
actitudes frívolas y superficiales que conducen a la anomia y arbitrariedad,
que destruyen la base de la vida de nuestra sociedad y expresan una opción por
la anarquía, la ofensa, el uso individualista, y el maltrato como forma de
comportamiento que no podemos aceptar para la convivencia social.
Lima, 7 de enero
de 2024
+ Carlos
Castillo Mattasoglio
Arzobispo de Lima
Primado del Perú
No hay comentarios:
Publicar un comentario