La visitación de la Virgen a su prima santa Isabel relatada en el Evangelio de Lucas ofrece algunas pistas interesantes para acoger a María. El Papa Francisco las explicó en su mensaje para la Jornada Mundial de la Juventud de Lisboa. En él ofrece 5 propuestas geniales para aprovechar la presencia de la Madre del cielo y la fiesta del 31 de mayo.
1PEREGRINAR
Francisco habla de “la relación viva entre la Madre del Señor y su pueblo, que se visitan mutuamente”.
Para el Papa, ir a un santuario de la Virgen o a otro lugar de gracia “es una clara expresión de confianza”. Solo ponerse en camino prepara el corazón para acoger.
Y la ayuda de la Madre del cielo es “inestimable”, dice Francisco, pero “ el mayor regalo de María a su parienta anciana fue llevarle a Jesús”.
2CELEBRAR
El 31 de mayo es el día de la fiesta de la Visitación de la Virgen María a santa Isabel, desde que el año 1969 lo decretó Pablo VI.
Recordar, actualizar y agradecer ese feliz encuentro, reflexionar sobre lo que transmite y sobre todo revivirlo en la Misa es la propuesta de la Iglesia católica para celebrarlo.
3PEDIR
“¡Cuántas personas en el mundo están esperando la visita de alguien que los atienda! ¡Cuántas personas mayores, cuántos enfermos, presos, refugiados necesitan nuestra mirada compasiva, nuestra visita, un hermano o una hermana que rompa las barreras de la indiferencia!”, recuerda Francisco.
Igual que María respondió a las necesidades de Isabel en Ain Karem, quiere hacerlo hoy en tantos lugares que la necesitan.
Pídele y ayúdale a hacerse presente en los países en guerra y los lugares donde se sufre violencia, allí donde haya necesidad del consuelo y de la ayuda de una madre.
4ACOGER IMÁGENES EN LOS HOGARES
Hay miles de imágenes peregrinas a través de las cuales María visita hogares (con sus embarazadas, ancianos, enfermos y familias), prisiones donde falta libertad, colegios en los que aprenden los niños, iglesias donde se propicia el gran encuentro con Dios…
5DESCUBRIR EL SENTIDO DE LA HOSPITALIDAD
El Papa Francisco invita a inspirarse en la prima de la Virgen y en su marido, así como en todos los que se han enriquecido a través de la acogida.
“Isabel y Zacarías acogieron a María y a Jesús. ¡Aprendamos de estos dos ancianos el significado de la hospitalidad!”, pide en su mensaje para la JMJ de 2023, que tuvo como tema “María se levantó y partió sin demora”.
“Pregunten a sus padres y abuelos, y también a los miembros mayores de sus comunidades, qué significa para ellos ser hospitalarios con Dios y con los demás -añade-. Les hará bien escuchar la experiencia de los que les han precedido”.
En un mundo polarizado donde los malentendidos crecen hasta convertirse en guerras, María reabre para todos el camino de la cercanía y del encuentro”, indica el Papa.
Ella está para todos y en todas partes, porque -asegura Francisco- “prácticamente no hay lugar en esta tierra que no haya sido visitado por ella”.
Patricia Navas, Aleteia
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