Otras culturas pueden enseñarnos a los padres algo más sobre la crianza de nuestros hijos
Cuando se trata de la crianza de los hijos, las diferencias culturales pueden aportar nuevas ideas y valores que la enriquecen. También puede facilitar que las personas aprecien y acepten no sólo las propias costumbres sino también lo bueno que pueden recoger de las otras ayudando a integrar nuevos estilos en esta tarea maravillosa que nos da la vida.
Hungría: las tradiciones populares
En Hungría las canciones populares son hermosas. Existe una costumbre llamada “ringató”, por la que una vez a la semana los padres se encuentran en una sala comunitaria. Se sientan en un círculo en el suelo con los bebés en sus regazos y cantan juntos. Existe la creencia de que al cantar se fomenta la inteligencia emocional y el desarrollo cerebral de los niños, al mismo tiempo que es una oportunidad de encuentro para los padres del vecindario.
Alemania: los juguetes y los libros
Alemania es el productor de muchos juguetes mundialmente famosos, desde los juguetes de madera Selecta, Haba y Hess y hasta las estatuillas de Playmobil y los animales Schleich. Las tiendas de juguetes generalmente tienen cosas bastante fantásticas con mucho menos plástico. En cuanto a los libros, no hay tanto énfasis en la alfabetización temprana, ya que los niños no aprenden a leer hasta que van a la escuela a los seis o incluso siete años.
Filipinas: la higiene personal
Hay un cuidado especial en mantener la higiene personal. Los niños tienen cepillos de dientes en la escuela y se cepillan junto con sus compañeros de clase. También es común que tengan una pequeña toalla cuando están afuera para poder limpiarse el sudor mientras juegan. Algo que llama la atención es que la mayoría de los baños filipinos tienen un tabo, un cubo lleno de agua para usarse en lugar del papel higiénico.
Tailandia: dar las gracias
Mostrar respeto es un aspecto fundamental para esta cultura. La gente cuando saluda o da las gracias pone sus manos juntas delante con un movimiento de manos que se llama “wai”. Los niños lo aprenden muy temprano cuando solo tienen nueve meses de edad con ayuda de sus padres. Estos les unen las manos hasta que aprenden a hacerlo ellos mismos.
Chile: las fiestas de cumpleaños
Las fiestas de cumpleaños son enormes para los niños, pero también para los adultos. En los meses más cálidos, las fiestas suelen celebrarse fuera y los padres alquilan enormes castillos inflables. El resto del año, se acostumbra a alquilar una casa de fiestas de varios pisos para que los niños se diviertan. Se espera que vengan todos los amigos y familiares.
España: la hora de ir a la cama
Como las familias españolas tienden a comer tarde, los niños terminan yendo a la cama más tarde de lo que uno puede estar acostumbrado. Habitualmente la cena es a las ocho por lo que los niños nunca se van a la cama antes de las diez de la noche. Es común verlos corretear hasta tarde durante los fines de semana si salen con sus familias a comer fuera o van a fiestas que no terminan hasta pasada la media noche.
Nepal: la manera de llamarse
En Nepal nadie se llama por el nombre de pila, sino que la gente se trata como si el otro fuera un miembro de su familia. Es frecuente que se refieran el uno al otro como ‘madre’, ‘padre’, ‘abuela’ o ‘abuelo’, y en el caso de los niños ‘hijo’ o ‘hija’ aunque no lo sean. Es una costumbre muy familiar y cambia mucho nuestra percepción de los demás. ¡La familia se agranda!.
Australia: la seguridad
Las reglas oficiales sobre la seguridad son muy estrictas. No sólo los autos tienen un cinturón adicional que gira alrededor de la parte superior del asiento, sino que los uniformes escolares de los niños incluyen sombreros para el sol debido a los golpes de calor y las tasas altas de cáncer de piel. Hay una regla que dice que “sin sombrero, sin juego”, por lo que no pueden salir a jugar si no están protegidos.
México: la enseñanza de la historia
En México la historia es muy valorada. En las escuelas es muy común que los niños sean introducidos a sus raíces motivándolos a participar en programas especiales de historia casi todos los meses. Los niños se visten con atuendos tradicionales o como revolucionarios políticos, y con entusiasmo cantan, bailan, recitan poesía y actúan en obras de teatro que representan eventos históricos importantes.
Argentina: el amor a los niños
No es extraño que un desconocido se acerque a los padres de un bebé para preguntarles si puede cargarlo en brazos. A los niños se los puede ver andando libremente por el altar de una iglesia mientras se celebra la Misa, o incluso en el lugar de trabajo de sus padres. Tampoco hay problema con la lactancia materna. Las madres pueden dar el pecho sin usar mantas de modestia donde quiera que se encuentren en público.
Francia: el ritual de la comida
La cultura de la comida en Francia es muy rica. En las guarderías los niños esperan a que todos tengan sus baberos y pasen el plato antes de comer su petit goûter. Participar en la comida es una ceremonia diaria, practicada y enseñada. Los niños tampoco comen entre comidas. Es una regla que un niño deba sentir hambre todos los días, antes de cada comida. Para los franceses “sólo un cuerpo hambriento puede apreciar completamente la comida”.
Cecilia Zinicola, Aleteia
No hay comentarios:
Publicar un comentario