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miércoles, 14 de septiembre de 2022

Evangelio del día


 

 Evangelio según Lucas 7, 31-35

Dijo el Señor: «¿Con quién puedo comparar a los hombres de esta generación? ¿A quién se parecen? 
Se parecen a esos muchachos que están sentados en la plaza y se dicen entre ellos: ‘¡Les tocamos la flauta, y ustedes no bailaron! ¡Entonamos cantos fúnebres, y no lloraron!’. 
Porque llegó Juan el Bautista, que no come pan ni bebe vino, y ustedes dicen: ‘¡Ha perdido la cabeza!’. 
Llegó el Hijo del hombre, que come y bebe, y dicen: ‘¡Es un glotón y un borracho, amigo de publicanos y pecadores!’. 
Pero la Sabiduría ha sido reconocida como justa por todos sus hijos.» 

Palabra del Señor

 Lectura, ¿Qué dice el texto?

Pero la Sabiduría ha sido reconocida como justa por todos sus hijos.

Siguiendo este texto, ¿Cuáles son las palabras o frases o actitudes que atraen tu atención, tu interés?

 Meditación, ¿Qué nos dice Dios en el texto?

En el evangelio de hoy hay una clara muestra donde el Señor nos dice que siempre habrá criticas ya sea por que estamos en un extremo o en el otro y termina mencionando a la sabiduría y quiero compartir con ustedes este mensaje 

Si quieres ser sabio, aprende a interrogar razonablemente, a escuchar con atención, a responder serenamente y a callar cuando no tengas nada que decir. Johann Kaspar Lavater

¿Soy de los que de una u otra forma estoy criticando, así como nos lo deja ver el Señor con el ejemplo de Juan y el mismo?, ¿Solo mi percepción de las cosas es válida?, ¿Acepto equivocarme y pedir disculpas?, en diálogos con mis hermanos ¿Busco la prudencia, la tolerancia, la paz, razonar adecuadamente, escuchar, responder y actuar apropiadamente?, ¿Me doy cuenta que una conversación o diálogo bien llevado, bien logrado, me da paz y me permite crecer en varios ámbitos?

Siguiendo el mensaje de este texto, ¿Cuál es tu meditación, tu reflexión personal?

 Oración, ¿Qué le decimos a Dios?

Que la paz y la verdad, siempre se hagan presentes en nuestras vidas, que cuando nos exaltemos o nos equivoquemos por nuestros malas críticas o malos cuestionamientos, tengamos la capacidad para decir «me equivoqué» sin miedo a nada, por que sólo así dejaremos que el Señor habite entre nosotros, sólo así demostraremos que estamos verdaderamente siguiendo la Palabra del Señor; que la paz, reine en nuestros corazones.

(cristonautas.com)

























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