¿Conversamos?
Quizás tú crees que no te he visto en aquella misa a la que fuiste, pero sí lo hice. Aunque haya miles de personas, Yo te reconozco y me pone muy contento ver que me visitas.
¿Sabes cuántos rosarios has rezado en tu vida? Yo sí. Conozco tu voz y tengo cuenta de cada Padrenuestro y cada Avemaría que has rezado desde que aprendiste estas oraciones. Sé también que intentas tener ratos de oración, ¡y cuánto lo valoro! Me encanta que me hables de tus cosas y, aunque sé todo lo que te pasa, espero con ansias a que vengas a contármelas.
Te amo y todo lo tuyo me es importante. No te preocupes si sientes que a veces tus oraciones son vacías, o si acudes a Misa por costumbre. ¿Sabías que también conozco tus miedos? Incluso mejor que tú. Por ejemplo, sé que a veces alzas los ojos al Cielo y, en el fondo, aunque no quieras admitirlo, parte de ti se pregunta si este no es más que un lugar vacío
No me lastiman tus dudas, ni me ofenden tus preguntas. Pero me gustaría respondértelas. Me gustaría que me conozcas. Me gustaría que tuvieses Conmigo, la relación que quiero tener contigo. ¿Recuerdas cuando conociste a tu mejor amigo? ¿O cuando te enamoraste? Querías saberlo todo sobre la otra persona. Quisiera que recuerdes que soy una Persona. ¿Te gustaría conocerme mejor? Yo te espero, Yo siempre te voy a esperar.
Con amor,
Dios
Mabe de Catholic link
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