Entradas populares

viernes, 18 de julio de 2025

Los jóvenes santos y la llamada a la santidad para todos

SANTA TERESA DE LOS ANDES

Santos como Teresa de los Andes, Carlo y Pier Giorgio nos muestran la belleza de las vidas jóvenes entregadas a la gracia de Dios y el más feliz de los finales

Dentro de unas semanas, el 7 de septiembre, dos jóvenes, Carlo Acutis y Pier Giorgio Frassati, serán canonizados por el Papa León XIV en Roma. Carlo Acutis tenía solo 15 años cuando murió de leucemia en 2006. Pier Giorgio Frassati tenía 24 años cuando murió de poliomielitis en 1925. Su esperada canonización nos recuerda que todos los jóvenes están llamados a la santidad y nos muestra que, por la gracia de Dios, incluso los hombres y mujeres más jóvenes pueden llegar a ser santos.

Una joven vocación

A la luz juvenil de estos dos jóvenes futuros santos canonizados, debemos recordar también a otra joven santa, Teresa de los Andes, de la Orden de Carmelitas Descalzos.

Santa Teresa de los Andes, primera santa de Chile, nació hace 125 años, en los albores del siglo pasado. De niña le gustaba jugar al tenis y al croquet. También era buena nadadora. Le gustaba cantar y bailar, y tocaba el piano y el armonio.

Pero fue la lectura de la autobiografía Historia de un alma, de Teresa de Lisieux, lo que cambió su vida. En 1914 decide seguir los pasos de Teresa, consagrarse al Señor y discernir una vocación religiosa con las Carmelitas Descalzas.

El 8 de diciembre de 1915, fiesta de la Inmaculada Concepción, hace voto de castidad, que renueva regularmente. A la edad de 17 años, escribe a la priora de un convento cercano de Carmelitas Descalzas expresando su deseo de entrar en la orden. Debido a su edad, necesitaba el permiso de su padre, que finalmente le fue concedido.

19 años y santa

En mayo de 1919, la joven de 18 años ingresó en el noviciado de las Carmelitas Descalzas de Los Andes, recibiendo el nombre de "Teresa de Jesús". Menos de un año después, el Viernes Santo (2 de abril de 1920), enfermó gravemente de tifus o de gripe española. Aún le faltaban seis meses para terminar el noviciado y hacer los votos religiosos, pero se le concedió permiso para profesar sus votos in articulo mortis porque estaba claramente a punto de morir. Tenía 19 años cuando murió el 12 de abril de 1920.

La corta pero santa vida de Teresa inspiró a miles de personas a rezar por su intercesión en los años siguientes a su muerte.

En enero de 1987, un comité de expertos médicos declaró milagrosa una curación atribuida a su intercesión. Tres meses después, el Papa Juan Pablo II la beatificó durante su visita pastoral a Chile. El hermano de Teresa, Luis, último superviviente de la familia, estuvo presente en la beatificación.

Pronta canonización

El segundo milagro requerido para la canonización de Teresa fue validado por expertos médicos en junio de 1992 y fue declarada santa por Juan Pablo II en marzo del año siguiente. Con ello seguía los pasos santificados de santa Teresa de Lisieux, que solo tenía 24 años cuando murió.

Santa Teresa fue canonizada el 17 de mayo de 1925, cinco años después de la muerte de Teresa y solo seis semanas antes de la muerte de Pier Giorgio Frassati. Hoy, gracias a Dios, todos ellos están unidos en el cielo.

Lugar de peregrinación

Santa Teresa de los Andes sigue siendo muy popular entre los fieles de su Chile natal. Cada año, unos 100 mil peregrinos visitan la tumba en la que reposan sus restos mortales. Las Carmelitas Descalzas celebran el 13de julio - cumpleaños de la santa - como su fiesta particular.

Su otra fiesta es el 12 de abril, fecha en la que nació a la vida eterna. A los ojos del mundo, vivió una vida trágicamente corta. A los ojos de la fe, su corta vida fue tan gloriosa que ha sido recompensada con el más feliz de los finales.

Lo mismo puede decirse de Pier Giorgio Frassati y Carlo Acutis. Sus vidas y su ejemplo de vida muestran que la juventud está llamada a la bondad y a la verdad que conducen a la belleza del cielo.

Joseph Pearce, Aleteia 

Vea también    La espiritualidad de los jóvenes





























No hay comentarios:

Publicar un comentario