La Santa Misa es el mismo sacrificio de Cristo en la cruz 1.
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 Nociones Dogmáticas:1. La Santa Misa es sustancialmente el mismo sacrificio de la cruz, con todo su valor infinito: la misma Víctima, la misma oblación, el mismo Sacerdote principal. No hay entre ellos más que una diferencia accidental: el modo de realizarse (cruento en la cruz, incruento en el altar). P. Antonio Royo Marín O.P. |
La Santa Misa es el mismo sacrificio de Cristo en la cruz 2.
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| Nociones Dogmáticas: 2. La Santa Misa, como verdadero sacrificio que es, realiza propísimamente las cuatro finalidades del mismo: adoración, reparación, petición y acción de gracias. P. Antonio Royo Marín O.P. |
La Santa Misa es el mismo sacrificio de Cristo en la cruz 3.
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| Nociones Dogmáticas: 3. El valor de la Santa Misa es en sí mismo rigurosamente infinito. Pero sus efectos, en cuanto dependen de nosotros, no se nos aplican sino en la medida de nuestras disposiciones interiores. P. Antonio Royo Marín O.P. |
El Santo Sacrificio de la Misa.
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 Estamos obligados a reconocer que entre todas las obras, que los fieles han de cumplir, no hay nada tan santo, ni tan divino como este imponente Misterio de la Santa Misa.Concilio de Trento |
Contemplando el Misterio de la Cruz.
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 La Santa Misa es Cristo en la Cruz, con María y Juan a los pies de la misma y los ángeles en adoración.Lloremos de amor y adoración en esta contemplación. San Pío de Pietrelcina |
Cuando no puedo asistir a la Santa Misa.
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 Cuando no puedo asistir a la Santa Misa, adoro el Cuerpo de Cristo con los ojos del espíritu en la oración, lo mismo que le adoro cuando le veo en la Santa Misa.San Francisco de Asís |
La Santa Misa es la oración perfecta.
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 "¡La Santa Misa es la manera más perfecta de hacer oración!"San Pablo VI "La Santa Misa es la oración perfecta y no puede ser sustituida. Toda otra oración encuentra su origen y cima en la Santa Misa". Padre Jordi Rivero |
La Sagrada Eucaristía contiene todo el bien espiritual de la Iglesia.
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 Los demás sacramentos, como también todos los ministerios eclesiales y las obras de apostolado, están unidos a la Eucaristía y a ella se ordenan. La sagrada Eucaristía, en efecto, contiene todo el bien espiritual de la Iglesia, es decir, a Cristo mismo, nuestra Pascua y Pan de Vida, que da la vida a los hombres por medio del Espíritu Santo. Así los hombres son invitados y llevados a ofrecerse a sí mismos, sus trabajos y todas las cosas creadas junto con Cristo.Concilio Vaticano II Presbyterorum Ordinis, n. 5 | |
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