Una oración para salir de la mediocridad
Señor, yo quiero arriesgar mi vida.
¿Para qué sirve si no es para darla?
No soy más que una persona cómoda
producto de una sociedad que busca seguridad,
dinero, placer, eliminando todos los riesgos.
¿Para qué sirve si no es para darla?
No soy más que una persona cómoda
producto de una sociedad que busca seguridad,
dinero, placer, eliminando todos los riesgos.
Señor, tú que naciste en el cansancio de un viaje
y moriste como un ladrón, después de haber
recorrido sin dinero todos los caminos,
arráncame de mi egoísmo y comodidad.
y moriste como un ladrón, después de haber
recorrido sin dinero todos los caminos,
arráncame de mi egoísmo y comodidad.
Marcado con tu cruz,
que no tenga miedo a la vida dura,
a los trabajos en que se arriesga la vida,
a las tareas que exigen responsabilidad.
que no tenga miedo a la vida dura,
a los trabajos en que se arriesga la vida,
a las tareas que exigen responsabilidad.
Señor, hazme estar predispuesto
para la gran aventura a la que me llamas.
para la gran aventura a la que me llamas.
Quiero comprometer mi vida
confiado en la certeza de tu palabra.
Quiero jugarme la vida por tu amor.
El mundo me dice que sea prudente y crea en el orden…
Tú me dices que crea en el amor.
Tú me dices que crea en el amor.
El mundo me dice que hay que conservar,
Tú me dices que hay que dar.
El mundo me dice que me instale,
Tú me dices que camine,
que esté esperando a la alegría y al sufrimiento,
al fracaso y al éxito, a no poner la confianza en mí,
a realizar mi fe sin preocuparme de las consecuencias.
Tú me dices que camine,
que esté esperando a la alegría y al sufrimiento,
al fracaso y al éxito, a no poner la confianza en mí,
a realizar mi fe sin preocuparme de las consecuencias.
En fin Señor, dame el poder arriesgar mi vida,
contando con tu amor.
Amén!
Artículo originalmente publicado por Oleada Joven
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