
Al final de la Via della Conciliazione, las campanas de la Basílica de San Pedro marcan las nueve en punto. En el otro extremo de la famosa avenida, en la Piazza Pia, varios miles de peregrinos esperan para hacer el corto peregrinaje hasta la Puerta Santa.
Para pasar el tiempo, un grupo de unos cincuenta suizos del Tesino -el único cantón de habla italiana de Suiza- empiezan a cantar "Laudato si'", el famoso himno de san Francisco de Asís. Entre ellos se encuentra Sonia, que viene por tercera vez a Roma con su marido y sus tres hijos, y que está encantada de poder "vivir aquí la experiencia de la Iglesia universal".

Esta madre es miembro de "Famiglia in rete", que significa "Familia en red". Esta es una organización que cada año realiza eventos para que las familias católicas puedan reunirse más a menudo para compartir su fe juntas.
"Para las familias, es importante tener puntos de referencia, poder conocer a otras familias que intentan educar a sus hijos con los mismos valores", explica, testimoniando que a menudo se encuentra "aislada" como católica en una sociedad cada vez más laica.
"Por encima de todo, nuestras familias necesitan paz"
Delante de los suizos, los peregrinos se hicieron fotos para inmortalizar el momento. Entre ellos, el Padre Samuel, de Camerún, está especialmente orgulloso de haber conseguido traer a 50 peregrinos de su país. "Es un momento intenso de oración, encuentro y camino espiritual", explica.
Él y su grupo han pasado los últimos días en Asís, siguiendo las huellas de san Francisco, antes de dirigirse a Roma para iniciar su recorrido por las principales basílicas. "Estamos deseando que llegue la Misa para recibir su bendición", dice.

Junto a él, Teresa, responsable de la pastoral familiar de la Conferencia Episcopal de Camerún, está encantada de poder "experimentar la gracia del Jubileo".
"En nuestro país, nuestras familias necesitan ante todo la paz, para poder vivir en un clima de comprensión, sin las guerras fratricidas que desgarran nuestras regiones", insiste, explicando que reza para que las próximas elecciones se desarrollen pacíficamente y traigan la serenidad a las familias camerunesas.
"Luz, esperanza, alegría y jabón"
En la larga cola que espera bajo el sol del verano en Via della Conciliazione está Gabriele, un joven scout de Palagonia, en Sicilia. Ha venido con su familia para unirse a un grupo creado por su parroquia, y ha hecho un poco de repaso antes de explicar qué significa para él el Jubileo. "¡El Jubileo es luz, esperanza, alegría y jabón!" El sacerdote que le acompaña se echa a reír: "¡El jabón es para ilustrar el perdón, que lava nuestros pecados!", explica.
Gabriele está deseando estar en Roma con sus amigos, visitar la ciudad y pasar bajo las puertas santas de las grandes basílicas. Está impaciente por asistir a la Misa celebrada por León XIV, que le parece "muy amable".

El reto de la transmisión
Cada dos minutos, un grupo se dirige a la Puerta Santa, pero la cola es larga. Detrás de la veintena de grupos hay algunos franceses, los últimos en llegar. Entre ellos está Grégory, de 47 años, ordenado diácono hace ocho meses para la diócesis de Arras y también muy contento de conocer al nuevo Papa este domingo. "Con este paso de las antorchas tras la muerte del Papa Francisco, tenemos a la vez emoción y curiosidad por ver al Papa León XIV en carne y hueso", subraya.
Acudió como parte de un grupo diocesano con su mujer, pero sin sus hijos. "Vienen este verano para el Jubileo de los Jóvenes, y como no podíamos venir con ellos, decidimos hacer nuestra peregrinación durante el Jubileo de las Familias", explica.

Para él, el reto más importante para las familias es el de la "transmisión":
"Como padre y como diácono, el reto importante para nuestras familias es conseguir transmitir la fe a nuestros hijos. Después, ellos pueden hacer lo que quieran con ella, pero nosotros tenemos que darles lo mejor de lo que creemos, aunque no sea fácil en la sociedad actual", subraya.
Mientras Grégory se reúne con su grupo, los peregrinos brasileños empiezan a caminar detrás de una cruz hacia la puerta santa de la Basílica de San Pedro y comienzan la letanía de los santos en portugués.
Camille Dalmas, Aleteia
Vea también Oraciones en Familia
No hay comentarios:
Publicar un comentario