Alo largo de la historia, pocos eventos han marcado tan profundamente el rumbo del cristianismo como el Primer Concilio de Nicea. Celebrado en el año 325 d.C., este concilio no solo fue clave para definir la divinidad de Jesucristo, sino que también sentó las bases de la unidad doctrinal de la Iglesia.
Convocado por el emperador Constantino I, en un momento de tensiones teológicas y políticas, el Concilio reunió a cientos de obispos para afrontar una de las mayores crisis de fe de la época: la herejía arriana.
Este documento te ofrece un resumen claro y completo de todo lo que debes saber sobre el Concilio de Nicea: quién lo convocó, por qué se celebró, qué decisiones se tomaron y por qué, 1700 años después, sigue siendo fundamental para la fe cristiana.
Fátima Navarro, Aleteia
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